CEPES y FUNDAE unen fuerzas para promover la formación como palanca necesaria para la recuperación y la transformación empresarial
La formación será uno de los pilares de la reconstrucción según el Plan de Impulso de la Formación Profesional del Trabajo Autónomo y la Economía Social, al que el Ministerio de Trabajo y Economía Social destinará 3,4 millones de euros. La Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES), es uno de los protagonistas de este Plan que consolida y articula la incorporación de las Entidades representativas de la Economía Social al sistema de Formación Profesional para el empleo.
Uno de los objetivos de dicho Plan es anticiparse a las necesidades formativas de las personas trabajadoras de la Economía Social y establecer las bases de una transformación global, protagonizada por la modernización, la digitalización, impulsada a su vez por los avances en la inteligencia artificial y la robótica. Todo ello conlleva la aparición de nuevos perfiles profesionales y que los existentes se adapten y supone una oportunidad de desarrollo profesional para construir un crecimiento inclusivo y sostenible.
En este contexto y con el objetivo de divulgar las oportunidades que ofrece la Economía Social en el futuro inmediato, CEPES está desarrollando una serie de Estudios financiados por la FUNDAE (Fundación Estatal para la Formación en el Empleo), con los que se pretende sentar las bases para caminar hacia una Transformación Digital y adaptar la formación a los nuevos perfiles profesionales y también analizar las oportunidades laborales de empleo y emprendimiento que supone la Economía Social para los jóvenes.
Para dar visibilidad a estos recursos, bajo el lema ‘Sigue los pasos de la Economía Social, la empresa del futuro’, CEPES está llevando a cabo una campaña de difusión con distintas piezas de publicitarias, contenidos patrocinados, vídeos y una exhaustiva promoción en sus canales de RRSS.
El presidente de CEPES, Juan Antonio Pedreño, ha insistido en “queremos canalizar la necesidad y la urgencia de facilitar a las personas trabajadoras y a las empresas todos los instrumentos al alcance para acceder a las competencias de los nuevos sectores emergentes, a la transformación digital, a los empleos del futuro y, a través de los recursos que ponemos a su disposición, ayudarlas a que generen proyectos innovadores y competitivos y con gran impacto social”.
Predeño añade: “tenemos la obligación de construir un futuro mejor y, en este contexto, las empresas de Economía Social, refuerzan la transición hacia sociedades más resilientes y contribuyen a reducir las desigualdades, pero para todo esto necesitan la formación”.
Fuente: Cepes